miércoles, 7 de diciembre de 2016

La dinastía Xia

Yu el Grande (Dà Yǔ)
En 1996 el profesor Li Xueqin, de la Universidad de Tsinghua, recibió el mandato del gobierno chino de establecer una cronología fidedigna de las distintas dinastías chinas, en especial de las más remotas, tratando de compaginar los recientes hallazgos arqueológicos con las milenarias tradiciones literarias. El proyecto se llamó Xia-Shang-Zhou Chronology Project (tomando el nombre de las tres dinastías más antiguas), reunió a más de 200 expertos y presentó sus primeros resultados en el año 2000. Aunque no libre de polémica por parte de otros investigadores, el caso es que las autoridades chinas lo dieron por bueno y esta cronología es la que, desde entonces, se considera la "oficial" en China.

Pues bien, según esta cronología, la dinastía Xia reinó en el período 2070-1600 a.C. , por lo que es la que nos encontraríamos en nuestro viaje imaginario al siglo XXI, a.C. Y, en concreto, a su primer rey Yu el Grande (大禹, pinyinDà Yǔ). Para ubicar el "reino", digamos que se extendía sobre la actual provincia de Henan, con un poco del oeste de la de Shandong y otro poco del sur de la de Hebei. El asentamiento de Erlitou, que se piensa pudo ser su capital en la etapa final de la dinastía, se encuentra a 800 Kms. al sudoeste de Beijing.

Yu se ganó el puesto por su éxito en solucionar el problema de las inundaciones periódicas del Río Amarillo (Huáng Hé). Al contrario que en Egipto y su Nilo, aquí la crecida del río no era sinónimo de riqueza y abundancia, sino de muerte y devastación, ya que frente al lento y sinuoso fluir del Nilo, los ríos de China se vuelven torrenteras enormes fuera de control (de hecho, las inundaciones del río Amarillo de los años 1332-1333 d.C. ostentan el récord histórico de devastación: se estima que murieron 7 millones de personas). 


A diferencia de sus predecesores (entre ellos su padre Gun), que se esforzaron en construir diques y más diques sin resultado, Yu ideó un sistema de canales para dirigir los excesos de caudal hasta el mar. 13 años duró la obra y se calcula que tuvo 20.000 trabajadores a su cargo. 


Localización de la cultura Longshan
Quizá por estas obras e inundaciones, y por las que vinieron después, el caso es que el río Amarillo desemboca en la actualidad 250 kms. más al sur de donde lo hacía en aquella época. Vamos, como si el Ebro hubiera cambiado su desembocadura a Gandía. 

El rey Shun le nombró sucesor y, a su muerte, dio comienzo su reinado, que duró 45 años. En cambio, Yu no nombró sucesor a uno de los más capaces de su reino, como era la tradición y había sido en su caso, sino a su hijo Qi (que no debía de ser el más espabilado), y así comenzó la tradición hereditaria en la monarquía china, dando origen a la dinastía Xia, que tuvo 17 reyes. 
Vasija de cerámica negra Longshan



Desde un punto de vista arqueológico, a este periodo de la Edad del Bronce en China se le conoce como de la cultura Longshan (montaña del dragón). En 1928 se encontró y se empezó a excavar el yacimiento de Chengziya, el mayor descubierto hasta la fecha. Su manifestación artística más representativa es una cerámica negra de altísima calidad y belleza, que incluso resulta difícil de replicar con los conocimientos y técnicas actuales. Se basaba en materiales areno-arcillosos que permitían hacer vasijas de paredes muy finas; después se pulían y se revestían de un acabado negro que les daba un tacto muy suave. 

Esta cultura marcó la transición hacia el nacimiento de las primeras ciudades, hallándose vestigios de muros de tierra prensada en los yacimientos de esa época. 

El cultivo más importante era el del mijo, en sus distintas variedades, usado para la alimentación de los animales. Para el consumo humano el cereal predominante era el arroz, que ya hacía milenios que formaba parte fundamental de la alimentación del oriente asiático, desde su "domesticación" en el valle del río Yangtsé, al sur. 
Inscripciones en una escápula (de una dinastía posterior)

El animal doméstico por excelencia era el cerdo (una variedad diferente al euroasiático, aunque posiblemente con un ancestro tipo jabalí común), y también criaban ovejas, cabras y... perros. Parece que ya conocían la producción de seda a partir de gusanos, aunque a pequeña escala. Se han encontrado restos de escápulas (omóplatos) de animales, utilizadas en ceremonias de tipo mágico, para adivinar el futuro.

Desde principios del siglo XX a.C. la población de esta zona comenzó a descender de forma continuada, se abandonó la producción de cerámica negra y se produjo una migración masiva hacia el sur. Se cree que la causa fue de orden climático, tal vez relacionada con el final de lo que se conoce como "Óptimo Climático del Holoceno" (7000 - 3000 a.C.), que significó la bajada de las temperaturas medias en las zonas más septentrionales del planeta. A diferencia del que nos amenaza actualmente, este cambio climático no fue causado por la acción humana (éramos cuatro gatos) sino por la combinación de fenómenos físicos relacionados con la órbita de la Tierra, su excentricidad, la inclinación de su eje, etc... que se conocen como "ciclos de Milankovitch" por el geofísico serbio que los formuló por primera vez.

Sobre la religión en tiempos de la dinastía Xia, no hay mucho descubierto. Se piensa que tenía componentes animistas, chamánicos y totémicos, como herencia del Neolítico. Los chamanes, a través de sus rituales esotéricos, facilitaban la relación con los antepasados, sujetos de una especial veneración que ha trascendido hasta nuestros días. Faltaban 1.500 años para el nacimiento de Confucio (Kong Fuzi) y la difusión de su filosofía.

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Tiempo de volver a África, pero a su extremo más meridional, a conocer a los "hombres del bosque".



El río Amarillo muestra su fuerza en las cataratas de Hukou

1 comentario:

  1. También es famosa la cerámica negra de Oaxaca-México (donde estuve buscando "predios" para instalar generadores eólicos hace algún tiempo). Como cuando hablábamos de la corteza del sauce como medicina, uno se pregunta si este conocimiento se originó en un punto y luego se propagó o bien surgió en diferentes puntos.

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