El valle del Indo

Rey-Sacerdote - frente

Rey- Sacerdote - espalda

Es curioso que, por los avatares políticos de la Historia, si hoy día queremos visitar el valle del Indo no tengamos que pedir visado para la República de la India (heredera etimológica del río) sino para la de Pakistán (heredera política del territorio, tras la partición de la India en el año 1947). Hay bastante acuerdo entre los historiadores (cosa poco frecuente, como vamos viendo a lo largo de este viaje) de que, a comienzos del 2º milenio a.C., había tres "civilizaciones" destacadas en el continente afro-euro-asiático: Egipto, Sumeria (incluyendo toda Mesopotamia) y la asentada en el Valle del Indo.

Como ya hemos visitado las dos primeras, vamos a darnos una vuelta por Harappa y Mohenjo-Daro, las dos ciudades principales de la tercera.

Civilización del valle del Indo en el siglo XXI a.C.

Ambas fueron descubiertas en los años veinte del siglo pasado. Porque esta cultura, que floreció durante casi dos mil años (3300-1300 a.C.), fue desapareciendo de forma progresiva y sus ciudades abandonadas. Unos dicen que por efecto de los cambios climáticos que afectaban a las dinámicas de sus ríos, de los que dependían sus cultivos y cosechas. Otros, que por la presión ejercida por los pueblos arios que, desde las estepas de Asia Central fueron expandiéndose hacia el sur, dando origen posteriormente a la cultura védica, quizá la más conocida de la India clásica.

Calle estrecha en Mohenjo-Daro

Pero volvamos al siglo XXI a.C. Se estima que Mohenjo-Daro podía albergar hasta 50.000 habitantes. Con el ladrillo como estructura básica de construcción (un ladrillo estándar de 24x14x7 cms.), la ciudad tenía un diseño totalmente planificado. Por ejemplo, las calles más estrechas tenían una anchura de 1,8 metros. Las siguientes, 3,6 m, 5,4 m. y 7,2 m. las más anchas.

Se decía que, así como en Egipto y Sumeria las grandes construcciones eran palacios para los reyes o templos para los dioses, y el pueblo llano sobrevivía en chozas de paja y adobe en suburbios malolientes y lodazales, en Harappa no había grandes construcciones, pero hasta en las casas más humildes, de una sola habitación, podía haber un wc incluído. Y perfectamente conectado a una red de saneamiento que se encargaba de alejar los residuos orgánicos lejos de las zonas habitadas.

Ornamentos 

En el valle del Indo se cultivaba trigo, cebada, sésamo, legumbres y melones. Los tejidos se elaboraban con lana y algodón. Había asnos, bueyes, búfalos de río y hasta elefantes (en cambio, parece que no criaban caballos).

Conocían el cobre, el estaño y el plomo. Tenían minas de oro y de plata y piedras preciosas como el lapislázuli y la turquesa. También trabajaban el marfil. Sus joyas y artesanías eran muy admiradas en Mesopotamia, con la que había un comercio muy activo a través de los puertos del delta del río.

Mohenjo-Daro Dancing Girl

Entre las piezas descubiertas (en 1926 por el arqueólogo inglés Ernest Mackay), destaca una figurita de bronce de 10,5 cm. de alto que parece representar a una joven bailarina (se conoce como la Mohenjo-Daro Dancing Girl). Obtenida mediante la técnica de fundición a la cera perdida, llama la atención por la finura de su silueta y la perfección de su acabado, que sólo se asemeja a lo que, muchos siglos después, se encontrará en las esculturas griegas.

Totalmente desnuda, lleva 24 brazaletes en el brazo izquierdo, 4 en el derecho y un collar al cuello. Los brazos son anormalmente largos; uno lo tiene apoyado en la cadera y el otro debía de sujetar un objeto que ha desaparecido. Transmite una gran seguridad en sí misma. Se encuentra en el Museo Nacional de Nueva Delhi (aunque Pakistán reclama periódicamente su "vuelta a casa").

Tablillas con 

Un misterio todavía hoy no resuelto es el de la escritura. Se han encontrado millares de tablillas, sellos,... con representaciones de animales, en su mayoría, y una serie de signos que parecen dar a entender algún tipo de "código". Pero nadie ha sido capaz de descifrarlo (y no se ha encontrado ninguna piedra "rosetta" con caracteres de varias lenguas que ayudara en su resolución). Además del buey, el rinoceronte, el elefante o el búfalo, animales comunes en esa zona geográfica, llama la atención un abundante número de tablillas con la imagen de un unicornio.

Dicen que, para tener una idea del aspecto físico de los pobladores del valle en aquel momento, no hay que fijarse en los perfiles que hoy asimilamos a los hindúes "típicos" (que serían los de ascendencia aria o indoeuropea), sino que serían más parecidos a los que hoy en día habitan algunas zonas del sur de la India. De piel más oscura y rasgos que nos recuerdan  a los aborígenes australianos (cada vez cobra más fuerza que la expansión inicial del Homo Sapiens por Asia se llevó a cabo en una sola "oleada", que partiendo del Creciente Fértil se extendió por la India, Indochina y Sudeste asiático hasta llegar a Australia. En una segunda etapa viró hacia el norte y pobló las actuales China y Japón).

Dos conocidas actrices de la India de rasgos muy diferentes: Aishwarya Rai, del norte, y Mindy Kaling, del sur

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Fin de la etapa por el Valle del Indo. Esta vez nos vamos a una isla, bueno, a lo que quedó de ella después de la gran explosión volcánica que convirtió en polvo, ceniza y piedra pómez buena parte de su territorio . Nos vamos a la antigua Thera, en el Mar Egeo.