viernes, 24 de marzo de 2017

Dilmun

Dios del agua de Dilmun
En el libro "Hace 4000 años" de Geoffrey Bibby, que ya mencioné en la primera entrada de este blog, el autor identifica sin lugar a dudas Dilmun como la actual isla de Bahrein, en el Golfo Pérsico. Sin embargo, no todos los expertos están de acuerdo con él. Algunos dicen que el nombre correspondería a una zona más amplia, que se extendería por la orilla occidental del mar desde Kuwait hasta Catar. Otros lo sitúan al otro lado del mar, en Persia. Y, para que no falten opiniones, hay otros que la sitúan al nordeste de la desembocadura del Eúfrates, cerca de la ciudad de Basora.

En lo que todos (o casi) están de acuerdo, es en el papel de Dilmun en el comercio marítimo de la época. Como centro de intercambio entre lo que tenía que ofrecer Mesopotamia (básicamente textiles) y lo que "exportaba" la civilización que ya visitamos en el valle del Indo (conocida en sumerio como Meluhha): maderas nobles, oro, marfil, cornalina, lapislázuli, etc... Y con un tercer agente en el tablero, Makan ó Magan (no claramente identificado todavía, pero que casi todos sitúan en Omán), y que aportaba el cobre que luego era utilizado por los orfebres sumerios. De alguna forma, Dilmun representaba en aquel momento en el Golfo Pérsico lo que Creta, primero, y Fenicia unos siglos después representaron en el Mediterráneo.


Mapa de la zona
Cuenta Bibby cómo, en una época en que no existía todavía el dinero, funcionaba el comercio. Según algunas tablillas de arcilla encontradas, la forma en que se documenta este tipo de acuerdo es que: "a cambio de tantas balas de lana, los participantes se comprometen, al regreso de su nave de Dilmun, a pagar tal cantidad de cobre en lingotes de buena calidad. No se asume ninguna responsabilidad sobre la pérdida en el tránsito". Sigamos con la versión de Bibby: el viaje de Ur a Dilmun duraba 3 días, un primer día en el curso final del Eúfrates y dos ya en el Golfo Pérsico. Se hacía escala en la isla de Failaka, en el golfo de Kuwait. 

En la isla de Bahrein había, en aquella época, abundantes manantiales de agua fresca (se piensa que eran pozos artesianos que, posteriormente, se secaron) y bastante vegetación (de la que, en unas condiciones más áridas, sólo han sobrevivido las palmeras datileras). En la costa septentrional de la isla se encuentran restos de murallas de piedra y de dos templos que, aunque algo posteriores a la época de nuestra visita, pudieron ser construidos sobre otros más antiguos.

Túmulos funerarios
También son famosos los túmulos funerarios que jalonan esta parte norte de la isla. Se dice que puede haber hasta 350.000 tumbas, correspondientes a miles de años de historia, lo que lo convierte en el mayor cementerio prehistórico del mundo. Cada túmulo tiene una o varias cámaras centrales de piedra, rodeadas por una pared baja y rellenas de tierra y grava. Tienen un diámetro entre 4,5-9 metros y 1-2 metros de altura. Fue una expedición arqueológica danesa la que, en 1950, empezó la excavación de algunas de estas tumbas. En el Museo Nacional de Bahrein, en Manama, hay tres salas dedicadas a los hallazgos relacionados con Dilmun.

(Paréntesis de asombro: como estas tumbas ocupan una superficie muy apetecible para nuevos desarrollos urbanísticos, en la sesión parlamentaria del 17 de Julio de 2005, el líder del partido salafista (radical islamista), Jeque Adel Mouwidah vino a decir que "Mejor tener casas para los vivos que tumbas para los muertos. Tenemos que estar orgullosos de nuestras raíces islámicas y no de una antigua civilización de otro tiempo y lugar, que sólo nos ha dado un vaso de cerámica por aquí y un hueso por allá". Está claro que cenutrios hay en todas partes).

Sellos de Dilmun en el Museo Nacional de Bahrein
Aparte de cerámica y huesos, lo que se ha encontrado también son numerosos sellos circulares, llamados "sellos de Dilmun", fabricados con esteatita ó con clorita. Se piensa que representaban una parte vital del comercio, que se usaban como identificadores, firmas, "trademarks", lacres e incluso como tarjetas de crédito (¿¿??). De hecho, se han encontrado estos sellos en ciudades sumerias y también en las del valle del Indo, lo que demuestra su pujanza comercial.


La población de Dilmun era de etnia semita, con alguna presencia amorita. Escribían en cuneiforme sumerio, y hablaban algún dialecto del acadio. Su dios principal era Inzak, y su esposa Panipa, si bien no hay más referencias de estas deidades más allá de sus nombres.

Tablilla del comienzo de la "Epopeya de Gilgamesh"
(Paréntesis literario-mitológico: Hay quien en la "Epopeya de Gilgamesh" - escrita en tablillas de arcilla, con escritura cuneiforme, hacia el 2.500 a.C.- identifica la isla donde vive Utnapishtim, el "Noé babilónico", con Dilmun. Es allí donde peregrina Gilgamesh para buscar el secreto de la inmortalidad que el dios Enlil les había concedido a él y a su mujer como supervivientes del diluvio. Le dicen que no hay tal secreto, sino una concesión divina, única e irrepetible. Como consuelo, le ofrecen una planta muy especial, que le devolverá la juventud, pero cuando se está bañando viene una serpiente y se la roba... ¡qué historias! Vuelve Gilgamesh a su ciudad natal Uruk decepcionado, y termina el poema).

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El viaje de nuestro reportero va llegando a su final. Pero, con fino instinto periodístico, se ha reservado para su última etapa un lugar extraordinario. Volvemos al Egeo. Al centro de la civilización minoica. A Creta.

Museo Nacional de Bahrein


5 comentarios:

  1. Angel nos deleitas cada semana con geniales viajes al pasado que dan unas ganas tremendas de coger la mochila y recorrer físicamente y redescubrir las huellas que todas estas civilizaciones nos han dejado su legado y que seguro nos haría disfrutar. Gracias por compartir tu conocimiento y curiosidad "impertinente" que no deja de despertar nuestra neurona cada semana. Enhorabuena de nuevo y en la próxima vida tienes que explorar el hacerte arqueólogo o mejor "Indiana Jones".

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  2. Angel,
    Muchas gracias por este estupendo viaje que has compartido con nosotros.
    Buen finde al reportero y a sus lectores.
    Me encarga un lugareño de estos pagos que te transmita: "shukraan jazilaan ealaa hadhih alrrihlat aleazimat alty sharakat maeana lk.hasan murasil eutlat nihayat al'usbue waqarayih" que creo que significa más o menos:
    شكرا جزيل على هذه الرحلة العظيمة التي شاركت معنا لك. حسن مراسل عطلة نهاية السبوع وقرائه
    Espero no haberme equivocado porque con tanto salto temporal, geográfico y cultural, aventura vertiginosa a la par que amena y formativa, la "interculturalidad idiomática" puede dar lugar a confusiones.
    Un abrazo. Nos vemos en el Egeo.

    PD: "Indiana Jones" dice Jesús, OO7 en ciertas facetas. Tienes un karma de "explorador de curiosidades secretas" que espero sigas compartiendo por aqui durante mucho tiempo.

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  3. Muchas gracias Jesús y Pedro por vuestras alabanzas. Gracias al Google Traslator (que lee bien la versión nasji; con la alfabética da resultados raros) descifro el cariñoso mensaje de tu amigo. Muy agradecido.
    Creo que ya he dicho varias veces que, mi primer objetivo, es pasármelo bien yo en el proceso de búsqueda y desarrollo de nuevos temas. Si, además, gusta lo que escribo, "miel sobre hojuelas".
    Eso sí, espero que mi curiosidad "impenitente" no se llegue a convertir en "impertinente" ;-)

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  4. ¿Se sabe si los habitantes de uno y otro lado del golfo Pérsico/Arábigo ya se llevaban tan mal hoy por aquellos tiempos?

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  5. Genial, Ángel, como siempre!! Quedo expectante de que nos sumerjas en la cultura monoica. No sé si nos hablarás algo de su escritura, la Lineal A. Guardo muy buen recuerdo de unas conferencias en la Complutense hace ya algunos años sobre lenguas sin descifrar. Cómo pasa el tiempo!! Qué recuerdos!!

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